viernes, 3 de abril de 2020

10 versículos para memorizar en tiempos de ansiedad | NIMROD LÓPEZ

Luego de que Dios detuviera las aguas del río Jordán para que su pueblo pasara en seco, le dio instrucciones a Josué para erigir doce piedras de testimonio. Estas servirían como recordatorio de las obras portentosas de Dios (Jos. 4:1-719-24).
Asimismo, el Señor nos da instrucciones específicas para nunca olvidar quién es Él y lo que hace por nosotros: “Este libro de la ley no se apartará de tu boca, sino que meditarás en él día y noche, para que cuides de hacer todo lo que en él está escrito” (Jos. 1:8, cp. Dt. 6:6-7). De este texto inferimos que los hijos de Dios debemos esforzarnos por memorizar su Palabra.
Quiero animarte a memorizar estos 10 versículos cortos y fáciles que te ayudarán a recordar el amor y el poder de Dios en este tiempo de pandemia y ansiedad.
1) “Jesús lloró” (Juan 11:35).
Este es uno de los versos que más muestra la empatía de Jesús frente al dolor humano. Él se conduele con nosotros y nos promete que en el futuro “ya no habrá muerte, ni habrá más duelo, ni clamor, ni dolor, porque las primeras cosas han pasado” (Ap. 21:4). Lo cual a su vez nos recuerda que nuestro hogar no está en el mundo, sino junto a nuestro Señor.
2) “Amémonos unos a otros, porque el amor es de Dios” (1 Juan 4:7).
El amor se muestra en la Biblia en términos prácticos. Por eso 1 Corintios 13 enlista una serie de ejemplos de lo que hace y no hace el amor. Una de las formas más prácticas de mostrarlo es la obediencia: obedece a Dios, las medidas tomadas por tu gobierno, y apoya a tu familia en este tiempo difícil. Si amas, obedeces al Señor.
3) “El amor nunca deja de ser” (1 Corintios 13:8).
La Biblia testifica que Dios es amor (1 Jn. 4:8). Él no solamente ama, sino que Él es la fuente misma del amor. Al estar en un mundo caído no podemos evitar las consecuencias del pecado, pero podemos recibir el perdón de Dios. Su amor por nosotros es inagotable y siempre nos cuida. Por eso podemos confiar en Él durante este tiempo difícil.
4) “Todas las cosas son posibles para el que cree” (Marcos 9:23).
Recuerda que Dios no necesita un puente para cruzar un mar o pasar un río. Tampoco necesita un barco para sostenerse sobre el agua. Él sigue haciendo milagros hoy. Esto debe incrementar nuestra fe en que Él hará lo que es imposible para nosotros.
5) “Todo lo puedo en Cristo que me fortalece” (Filipenses 4:13).
La economía mundial está afectada y amenaza a millones de personas. Filipenses 4:13, en su contexto, nos muestra la clave para el contentamiento. En cualquier cosa que suceda, ¡todo lo podemos soportar en Cristo porque no nos desampara jamás!
6) “La fe viene del oír, y el oír, por la palabra de Cristo” (Romanos 10:17).
Ante la pandemia que sacude al mundo, recordemos que lo peor que puede pasarle a alguien es morir sin Cristo. Cuéntale a todos que el evangelio consiste en que Cristo nació, murió, y resucitó para darnos vida eterna. Necesitamos creer ese mensaje (Ro. 10:9-11).
7) “Pidan, y se les dará; busquen, y hallarán; llamen, y se les abrirá” (Mateo 7:7).
En este tiempo surgirán muchas necesidades y es oportuno pedir a Dios que nos ayude. Si pedimos conforme a su voluntad, Él nos oye. ¡Tenemos esa garantía! Pídele a Dios por paz, confianza en Él, sanidad, y que te ayude a ver con la claridad que Él tiene.
8) “Protégeme, oh Dios, pues en Ti me refugio” (Salmos 16:1).
¿Esta situación revela que confías en tu dinero, empresa, negocio, o ministerio? Las crisis son oportunidades que marcan un punto de quiebre y redireccionan nuestra vida. Quizá Dios esté usando esto para traer a sus caminos a muchos apartados. ¿Te refugias en Él?
9) “El Señor peleará por ustedes mientras ustedes se quedan callados” (Éxodo 14:14).
En medio de las circunstancias difíciles somos tentados a buscar la salida en nuestras propias fuerzas y por nuestros propios medios. Este es un buen tiempo para recordar que no debemos temer, pues la salvación que más necesitamos viene de Dios.
10) “El ángel del Señor acampa alrededor de los que le temen, y los rescata” (Salmo 34:7).
Algunas personas dicen que “la mente puede hacer un infierno de un paraíso o un paraíso de un infierno”. Es bueno que te preguntes: ¿de qué llenas tu mente? Para que sepamos lo que Dios espera de nosotros debemos leer y reflexionar en su Palabra. El Salmo 34:7 afirma que Dios cuida de ti y está en control de todo lo que acontece en tu vida.
Dios muestra su amor al dejarnos el consejo de su Palabra; los beneficios de leer, estudiar, memorizar, y guardar sus mandatos son incontables. Guardar la Biblia en nuestra mente nos ayuda a tener presente quién es Él y lo que ha hecho por nosotros.
¿Te esforzarás en memorizar la Palabra de Dios junto a tu familia?

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