martes, 6 de enero de 2015

Un Espíritu Correcto y el Fracaso

Un Espíritu Correcto y el Fracaso

Día 6

El fracaso es parte de nuestra vida. 

Albert Einstein dijo: ‘La persona que jamás ha cometido un error nunca ha intentado nada.’

En la vida, a veces ganamos y a veces aprendemos. Cada error o fracaso es una oportunidad para crecer y aprender y, si comprendemos que así nunca perdemos, porque sólo ganamos o aprendemos, entonces, las dos cosas se vuelven igual de importantes y valen la pena.

Pero si tenemos un espíritu incorrecto en cuanto al fracaso, decidiremos culpabilizar e inventar excusas y, nuestros errores se convertirán en la culpa ‘del otro’. Y aún así, aunque un fracaso sea culpa de otro, deberíamos tomar responsabilizad por ello, ya que muchas veces, ese fracaso es porque nosotros hemos tomado ciertas decisiones que han colocado a esa persona en una posición donde podía hacer que nosotros fracasáramos.

La Biblia dice que no seamos avalistas. ‘Bueno, sí, pero yo creía que era un buen chico y creía en él…’ Pero entonces incumple justo en aquello que le habías ‘avalado’ y tú acabas siendo el máximo responsable de ello. Puedes culpar a otro e inventarte excusas y sí, quizá fue el otro el que se equivocó, pero la sabiduría divina nos llama a vivir por lo que la Palabra de Dios dice. Personalmente, cuando hablamos de prestar cosas, creo que si no puedes permitirte perderlo, entonces no deberías dejarlo prestado. Es mucho mejor dar y ser generoso que no poner a una persona en una posición donde ésta tenga poder sobre tu fracaso y tu éxito.

Vive responsablemente.

Cuando conduzco mi moto, soy muy consciente de que no hay muchas segundas oportunidades. Eso significa que conduzco diferente. No espero que el otro conductor me deje pasar o haga lo correcto o me haya visto. Tengo que tomar responsabilidad personal por mis acciones, especialmente cuando mi vida es la que está en juego.

Creo que así es cómo debemos vivir nuestras vidas. En vez de dar a los demás poder sobre nuestros éxitos y fracasos, tomemos responsabilidad sobre nuestras vidas. Si yo tuviera un accidente de moto, aunque el otro tuviera la culpa y le multasen a él, esa multa no me ayudaría en nada. Ese mismo principio se aplica a cada área de la vida. 

Si tú vives responsablemente, lo peor que te puede pasar es que aprenderás de tus errores. Una cosa es cometer errores y otra cosa muy diferente es cometer los mismos errores vez tras vez porque no queremos aprender. Ten un espíritu correcto también en tus errores y fracasos. Dios exalta al corazón humilde. 

ORACIÓN: Querido Dios, enséñame humildad. Cuando tropiece, oro que tenga el espíritu correcto para arreglar mis defectos y aprender de ellos. Dame un corazón que busque ser responsable y enséñame qué es la santidad.

VERSÍCULOS:
Proverbios 9:7-12 (El Mensaje)
Efesios 5:15 (DHH)
Romanos 14:10-12 (El Mensaje)

1 comentario:

  1. Excelente Walter. Necesitamos crecer en responsabilidad y tambien en santidad.

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